No creas en mi

 

No creas en mis palabras, no creas en mis voces. No creas en mis ojos, ni creas en mis manos. Solo ten fe en mi, solo ten fe en mi, en mis palabras, en mis manos, en mis voces, en mis ojos. No me creas, no me sientas, no me quieras. Solo ámame, solo extráñame, solo necesítame. No me creas, experimenta conmigo. No me creas, atrévete. No me creas, solo confía.

 

Si no puedo hablarte sin mi, si no puedo esperar por ti, si estoy aprendiendo a volar y sobre todo a aterrizar, no puedo volar sin ti, solo puedo aterrizar por ti, solo puedo aprender y pretender por ti, contigo. Pero te repito amor mío, que no debes creerme, que no debes hacer caso a mis palabras ni a mis voces, que solo debes confiar en mi, que solo debes entregarte con la fe que da el amor, con la sensación de seguridad que da el amor, con las palmas hacia arriba esperando a Dios en humildad, esperando al amor en humildad, simplemente con confianza y siempre con humildad. No me creas, solo ámame. No me creas, sólo créame. No me creas, solo quédate conmigo.